Fecha de lanzamiento: 25 de octubre de 2019
Infinity Ward decidió reiniciar la franquicia Modern Warfare en 2019 contándonos cómo se formó la fuerza operativa 141 —Price, Ghost, Gaz y Soap— con la ayuda del héroe de la CIA Alex Keller y la líder del FLU, Farah Karim.
El juego presentaba una nueva versión del motor de Call of Duty , que ofrecía una renovación visual total de la franquicia mediante tecnologías como la fotogrametría y el trazado de rayos. Esto abría la puerta a una campaña que incluía "Clean House", donde debíamos tratar de obtener el logro "Camino dorado" superando el nivel sin que nos alcanzasen y sin desperdiciar una sola bala.
La historia continuaba en Operaciones especiales, un modo cooperativo para cuatro jugadores con operaciones de objetivo múltiple y experiencias "clásicas" similares a las del Operaciones especiales original.
Mientras, en multijugador, hicieron su aparición los operadores, personajes con biografías definidas y con atuendos alternativos en forma de "aspectos". Tiroteo se convirtió en el campo de pruebas perfecto para enfrentamientos 2c2 con armamento aleatorio en mapas nuevos como Speedball, Stadium, King, Docks o Gulag Showers y otros clásicos como Rust o Shipment. También llegaron nuevos mapas principales que se han ganado un puesto en la lista de los más grandes de la franquicia, como Gun Runner, Hackney Yard, Khandor Hideout y, cómo no, Shoot House.
Y luego está el caso de Guerra terrestre, que se amplió a 32c32 jugadores, más que ningún otro mapa multijugador del modo hasta aquel momento.
También se introdujeron formalmente las mejoras de campo y se ampliaron de manera muy considerable las posibilidades de personalización de armas del armero con la llegada, entre otras cosas, de los proyectos de arma, variantes estáticas especiales de las armas básicas. El armero permitía también añadir accesorios y un amplio abanico de opciones estéticas, con pegatinas, retículas (solo con los accesorios ópticos), amuletos y camuflajes como los clásicos de Oro y Platino para los más concienzudos, así como novedades tan atractivas visualmente como los de Damasco y Obsidiana.
Modern Warfare marcó también un momento muy importante para Call of Duty en general, pues nos trajo el Pase de batalla y el juego y la progresión multiplataforma, contenidos poslanzamiento como mapas, modos y armas funcionales, y la temporada inaugural de la Call of Duty League para los jugadores profesionales.
Y, por supuesto, supuso también la llegada de Call of Duty: Warzone, una experiencia en línea masiva y gratuita que, además de cambiar radicalmente la propuesta de la franquicia, no dejó un récord sin batir: seguro que recuerdas cuando más de 100 millones de jugadores —y más de 125 millones en solo un año— participaron en la primera versión de este modo.
Call of Duty: Warzone incluía uno de los "mapas grandes" que más han gustado a los jugadores: Verdansk. Con sus muchos e infames puntos de interés (¿hay alguien que no se acuerde de Superstore?), redefinió la experiencia del Battle Royale, además de incluir multitud de estrellas invitadas como operadores y muchos eventos memorables, desde la apertura del estadio a los divertidos sustos de La maldición, pasando por una invasión de zombis y el regreso a una versión anterior del mapa con la llegada de Verdansk '84, durante Call of Duty: Black Ops Cold War.
Fue también un momento crucial para Raven Software, quien, después de pasarse varios años desarrollando sus propios juegos y ejerciendo tareas de apoyo en los lanzamientos de Call of Duty desde Black Ops, colaboró con Infinity Ward para crear y actualizar la experiencia y, hasta nuestros días, sigue siendo la punta de lanza del desarrollo de Call of Duty: Warzone.
Call of Duty: Black Ops Cold War (2020)